Postales de la Vendimia

Marzo 2010 - Postales obtenidas de Diario Los Andes
Fotos: Andrés Larrovere / Los Andes (alarrovere@losandes.com.ar)



El hombro del cosechador soporta los kilos del tacho cargado de uva en su trayecto al camión.


Con cuidado, cada cosechador corta los racimos de la planta.


Acelerando el paso camino al camión. Cada cosechador intenta hacer rendir al máximo el día de trabajo.


Las tijeras, herramientas esenciales del vendimiador.


Hombres y mujeres trabajan por igual en la finca ubicada en el distrito Cordón del Plata de Tupungato.


De a poco los cajones se llenan de racimos, cada trabajador se esfuerza por acarrear la mayor cantidad de tachos.


La vitivinicultura es la principal actividad agrícola de la provincia y emplea a miles de mendocinos y también a muchos trabajadores de otras provincias.


Con una sonrisa la cosechadora carga su tacho colmado de racimos.


Después de cargar los tachos, cada cosechador vuelca los racimos en los cajones para después ser llevados a la bodega donde se convertirán en el preciado vino mendocino.


Entre las hileras, los trabajadores se mezclan con las parras en su afanosa tarea de recolectar racimos.


Las sufridas manos vuelcan el contenido del tacho en los cajones donde se traslada la uva recolectada.


Muchas veces, mientras los padres trabajan, los más chicos juegan en los surcos de las fincas.


Un cosechador cuenta las fichas conseguidas en un día de arduo trabajo.


Casi completo, después de un largo día de trabajo el camión esta lleno y listo para partir hacia la bodega.


Al final del día y ya con el tacho vacío el vendimiador regresa a casa para reponer fuerzas, mañana será otro día.


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